Fueron 27 partidos entre 2010 y 2018 en los que ganó ocho, empató ocho y ganó 11. De menos a más, el luso se terminó convirtiendo en un azote para el conjunto azulgrana, protagonizando algunas imágenes míticas, como su celebración en la Liga de los récords. Hasta el año 1994 nadie sabía que en Nigeria hubiese siquiera una selección de fútbol, pero en ese año, 1998 y 2014 llegó a los octavos de final en los mundiales, en las olimpiadas de Atenas de 1996 ganó el oro olímpico y revolucionó el mundial de 2018. Ha sido el único equipo africano que jamás haya conseguido semejantes hazañas.